miércoles, 23 de abril de 2008

CRUCE DEL ESTRECHO DE SAN CARLOS: Un ejemplo de vida

María Inés Mato nada en aguas heladas y lo hace a mar abierto: a los cuatro años perdió parte de su pierna derecha en un accidente de tránsito. Pero eso no la debilitó. Tal vez le dio motivos para rebelarse en busca de "nuevas experiencias".Profesora de letras y tiene entre otros grandes itinerarios... nadó en el Canal del Beagle, en el Canal de la Mancha y en el estrecho de Gibraltar. Y ahora acaba de consumar su gran proeza: cruzó el estrecho de San Carlos, que separa a las islas Gran Malvina y Soledad. "Fueron dos horas y 44 minutos, sí, cinco kilómetros", detalla María Inés. Y agrega: "Nadé desde Jersey Point (la isla occidental) hasta el Promontorio Güemes (isla oriental). Y quería ir a Malvinas para dejar una cuota grande de vida en un lugar marcado por la muerte. Para nadar en agua fría, a mí siempre me acompañó un cristal. Lo llevé a todas partes. Y lo dejé en Malvinas como símbolo de paz". Fiel a ese desvelo por sentir el contacto con el agua, nadó "sólo con la malla, la gorra y las antiparras. Ahora se instaló un debate sobre los trajes de neoprene -comenta-. Se dice que favorecen la flotación. Puede ser que favorezcan la flotación. Pero evitan el contacto con el medio.
Fuente: Diario Olé


No hay comentarios.: